Un joven fue capturado en Bogotá tras volcarse el vehículo particular de su tía, que utilizaba para cometer robos en la localidad de Engativá. El incidente ocurrió durante una persecución policial que se inició después de que las autoridades sorprendieran a un grupo de delincuentes robando en varios sectores del norte de la capital.
Según informaron las autoridades, los criminales operaban principalmente en Usaquén y Suba, donde se dedicaban a saquear vehículos estacionados en bahías y parqueaderos.
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La persecución comenzó cuando la Policía hallaron a los delincuentes rompiendo los vidrios de un automóvil para robar los bolsos que se encontraban en su interior. Tras varios minutos de seguimiento, el conductor del carro particular perdió el control y se volcó en la intersección de la carrera 30 con calle 80.
Este accidente permitió la captura del joven, aunque sus cómplices, que se movilizaban en un taxi, lograron escapar.
Las autoridades detallaron que el grupo de delincuentes utilizaba tanto un carro particular como un taxi para desplazarse y cometer los robos. En el caso del joven capturado, se descubrió que empleaba el vehículo de su tía para llevar a cabo los hurtos en Engativá, en el occidente de Bogotá.
Lo que llamó la atención del caso fue que, al llegar al lugar del accidente, la propietaria del automóvil resultó ser la tía del criminal, quien confrontó a su sobrino y lo golpeó ante su reacción. Fue así como la mujer explicó a las autoridades que le había prestado el vehículo para que trabajara en una aplicación de movilidad, sin imaginar que su familiar lo estaba utilizando para cometer delitos.
En diálogos con El Ojo de la noche de Noticias Caracol, el delincuente habló sobre lo que venía haciendo desde hace varios días en el occidente de la ciudad. “El carro llevaba pocos días con ella (la tía) y me habían dado la confianza de sacarlo y darle la vueltica. No hace mucho me dedico a esto”, reveló.
Además, el capturado expresó su arrepentimiento: “No me dedico a robar, los del taxi no venían conmigo. Yo no tengo nada que ver. Arrepentido, como le acabo de decir, cada acción tiene una consecuencia, las consecuencias son malas”.