Con la llegada de octubre, se aproxima un ‘feriado largo’ que genera un entusiasmo contagioso entre las personas. Esta expectativa se basa, en gran medida, en la oportunidad de disfrutar de unos días de descanso, ideales para desconectar de la rutina diaria y compartir momentos valiosos en familia y con amigos.
Muchos ya están planeando escapadas a la playa, excursiones a la montaña o simplemente disfrutar de actividades culturales en la ciudad. La posibilidad de crear recuerdos inolvidables y la promesa de un merecido descanso alimentan la alegría y la esperanza de que este feriado se convierta en una pausa revitalizante.
Ahora bien, los días que abarca el ‘feriado largo’ del décimo mes del año son cuatro: sábado 5, domingo 6, lunes 7 y martes 8. De estas fechas, solo una es feriado nacional, que corresponde al segundo día de la semana.
Pero, ¿por qué se considera un ‘feriado largo’ si el lunes los trabajadores del sector privado deben trabajar? En realidad, es un “fin de semana prolongado” solo para los empleados del sector público, quienes se beneficiarán del día no laborable del lunes 7 de octubre. Cabe señalar que quienes disfruten de este descanso adicional tendrán que compensar las horas no trabajadas durante las semanas siguientes, tal como lo establece la normativa vigente.
De esta manera, los trabajadores del Estado podrán disfrutar de cuatro días libres, ideales para realizar actividades de ocio, compartir momentos en familia o avanzar en proyectos pendientes. En medio de la expectativa por el próximo ‘feriado largo’, muchos podrían preguntarse qué se conmemora el 8 de octubre. Es importante señalar que la fecha festiva no está relacionada con ninguna figura religiosa, a pesar de que octubre es tradicionalmente el mes del Señor de los Milagros en Perú.
¿Qué suceso histórico se conmemora el 8 de octubre en el Perú?
El 8 de octubre en el Perú se conmemora el Combate de Angamos, un enfrentamiento naval decisivo ocurrido en 1879 durante la Guerra del Pacífico. En esta contienda, el almirante Miguel Grau, comandante del monitor Huáscar, perdió la vida defendiendo al Perú frente a las fuerzas navales chilenas. Este día es reconocido como un homenaje a Grau, considerado un héroe nacional por su valentía y honor en la batalla, y es feriado en todo el país.
Habiendo desentrañado el hecho histórico que se conmemora el 8 de octubre, es pertinente recordar lo que ocurrió ese día en 1879. En esta fecha, un grupo de hombres a bordo del monitor Huáscar, bajo el mando de Miguel Grau Seminario, se convirtió en protagonista de uno de los combates navales más memorables y gloriosos de la historia marítima de las naciones.
Un vistazo al Combate de Angamos
Miguel Grau falleció el 8 de octubre de 1879 durante un enfrentamiento naval en la guerra con Chile. El combate tuvo lugar cerca de Punta Angamos, donde el monitor Huáscar, bajo su mando, se enfrentó a las fuerzas chilenas. Nuestro compatriota murió cuando un proyectil impactó en la torre del Huáscar, llevándose también la vida del teniente Diego Ferré.
Pero, ¿qué sucedió minutos antes del fatídico hecho? Gastón Gaviola, escritor y periodista, escribió un artículo sobre el suceso histórico.
“Y lo que miran es cómo súbitamente el Cochrane acelera su marcha y enfila a toda velocidad sobre ellos. La torre Cole y sus 2 cañones han medido las distancias de su enemigo, lo tienen cada vez más cerca. Ambas piezas asoman sus bocas negras por las troneras de la torreta blindada y hacen fuego. (…) Esta vez pueden ver que el tiro dio en carne. Los oficiales peruanos conocen su oficio y apuntaron sobre el cinturón del máximo blindaje del Cochrane. El resultado fue la perforación de su casco. (…) La mole se sigue acercando”, escribió.
“Son las 9 y 50 de la mañana, cuando el Cochrane abre fuego directo contra el monitor. La pequeña torre de comando se infla desde dentro como si se tratara de una burbuja. Las planchas de acero se comban hacia afuera mientras todo queda envuelto por un halo rojo sobrenatural. Miguel Grau Seminario, su forma física, ha desaparecido devorado por la explosión”, agregó el hombre de prensa.
El conflicto comenzó el 30 de septiembre de 1879, cuando la División Naval del Perú, compuesta por el monitor Huáscar, la corbeta Unión y el transporte Rímac, zarpó hacia el sur en dirección a Iquique. Al llegar el 1 de octubre, el Huáscar y la Unión continuaron su misión hacia las costas chilenas.
La situación era insostenible para los chilenos, lo que llevó al relevo de su Alto Mando Naval. El nuevo comandante en jefe, el almirante Riveros, ideó un plan para capturar al Huáscar. Dividió su escuadra en dos divisiones: la primera, compuesta por el acorazado Blanco Encalada, la goleta Covadonga y el transporte armado Matías Cousiño; y la segunda, por el acorazado Cochrane, la corbeta O’Higgins y la cañonera Loa.
Ambas divisiones zarparon hacia Arica el 2 de octubre, llegando el 4, sin encontrar a las naves peruanas.
El 4 de octubre, la División Naval Peruana llegó a Sarco, al sur de Huasco, donde apresaron a la goleta chilena Coquimbo. Al día siguiente, continuaron hacia el sur; llegaron a Coquimbo y luego a Tongoy, cerca de Valparaíso. Al enterarse del zarpe de los chilenos, Grau decidió no arriesgarse más al sur y emprendió el retorno hacia el norte. Durante los días 6 y 7, el Huáscar sufrió desperfectos en sus máquinas, que fueron reparados en alta mar.
El 8 de octubre, a la 01:00 horas, el navío del ‘Caballero de los Mares’ llegó a Antofagasta sin encontrar buques chilenos y continuó hacia el norte. A las 03:00 horas, divisaron humos procedentes del norte, inicialmente pensados como mercantes. Para evitarlos, Grau ordenó navegar al oeste y luego al norte.
Sin embargo, los humos correspondían a los buques de la primera división chilena, que comenzaron la persecución. Tras tres horas de navegación, los peruanos lograron burlar al enemigo, dejándolos a 8 millas de Punta Tetas.
A las 07:15 horas, navegando hacia el norte, divisaron otros tres humos por el noroeste, pertenecientes a la segunda división chilena. Grau comprendió que el cerco sería difícil de evitar, ya que la velocidad y el poder artillero del Huáscar eran superados por los acorazados chilenos. Decidió continuar hacia el norte para intentar rebasar Punta Angamos. Evaluando la situación, ordenó a García y García salvar su buque, la Unión, para no sacrificarlo.
A las 09:40 horas, Grau presentó combate y efectuó el primer cañonazo hacia el Cochrane, iniciando el encuentro a la altura de Punta Angamos. El acorazado chileno estrechó distancias y comenzó sus disparos, obligando al Huáscar a gobernar con aparejos. A las 09:50 horas, un proyectil impactó en la torre del Huáscar, causando la muerte de Grau.