Héctor Enrique Pelayes, un policía retirado de Mendoza, miembro de la fuerza provincial, fue asesinado por un delincuente que intentó robarle ayer domingo a las 21:30 en su casa de la zona de Corralitos, en Guaymallén.
Según confirmaron fuentes policiales a Infobae, el hecho ocurrió cuando dos hampones armados entraron a la casa. Así, redujeron a los miembros de la familia presentes, entre ellos, un nieto de Pelayes. El policía retirado se encontraba en el baño al momento del asalto. Al salir se enfrentó a los delincuentes, que estaban encapuchados, según adelantó Diario Uno.
Así, comenzó un intercambio de disparos, Pelayes y uno de los asaltantes resultaron gravemente heridos: el segundo delincuente logró escapar durante el tiroteo. Finalmente, personal de la Comisaría 35° y una ambulancia del SEC, llegaron al lugar tras la alerta. Los médicos confirmaron que tanto el policía retirado como el delincuente habían fallecido a causa de los disparos. La fiscal Claudia Ríos, de la Unidad de Homicidios del MPF mendocino, está a cargo del esclarecer el caso. Ordenó tareas a la Policía de Investigaciones para encontrar al cómplice.
El ladrón muerto, identificado como Roberto Rolando Pereyra Cruz, tenía antecedentes penales por homicidio en ocasión de robo y amenazas agravadas. “Tenía una condena por un hecho de febrero del 2016. Le dieron 12 años y 6 meses. En abril de 2023 le dieron la libertad condicional”, asegura una fuente del caso. Pelayes, por su parte, había intentado incursionar en política años atrás, como precandidato a senador de un partido que aglutinaba a jubilados y pensionados.
El prontuario del ladrón muerto
Pereyra, también oriundo de Guaymallén, había entrado el 29 de febrero de 2016 al Complejo Penitenciario N°1 de Boulogne Sur Mer acusado de homicidio criminis causa en ocasión de robo, un ataque en poblado y en banda. Dos meses más tarde recibió la prisión preventiva por el hecho. Fue condenado a seis años en 2018.
Sin embargo, logró salir en abril de 2023, cuando estaba en la Unidad IV de Lavalle, una colonia y granja penal. En ese entonces, un fallo del juez Sebastián Sarmiento le otorgó la libertad condicional.
Así, Pereyra fijó domicilio en la zona de Maipú. Entre otras medidas, le ordenó “abstenerse del consumo de sustancias estupefacientes y el abuso de bebidas alcohólicas”, “acreditar medio de vida lícito” y “no cometer nuevos delitos”.