La colaboradora de televisión hace unas semanas conseguía su propio sillón permanente en ‘¡De Viernes!’ y, como era de esperar, las problemáticas que rodean a su familia también se tratan en el programa, por lo que es el momento perfecto para descubrir cuál es su opinión personal al respecto. Hoy, durante la emisión del programa, se daba a conocer qué opina Edmundo Arrocet acerca del embarazo de Alejandra Rubio y el resto de cuestiones que envuelven a la familia actualmente.

Antes de entrar en barrena, Terelu Campos confesaba que no le había gustado cómo compañeros de la profesión habían revelado el sexo de su sobrino sin el permiso de Alejandra Rubio y Carlo Costanzia. Aprovechaba para comentar que Alejandra no habría estado de acuerdo con este gesto por hacer «un espectáculo de algo que pertenece a su intimidad».

Después de emitir la entrevista a Edmundo Arrocet, imágenes que Terelu contemplaba sin articular palabra, rápidamente declaraba que no tiene nada que ver con él: «Dice que me contesta, pero debe ser que a veces, no sé, veo muertos, fantasmas o algo, con mi cara, porque yo nunca, nunca he hablado de esta persona, nunca, y lo único que he hecho eso sí, agradecer a sus dos hijos pequeños, a Max y a Estefanía, el cariño, el amor y el respeto, el respeto a mi madre».

El que fuera pareja de María Teresa Campos sacaba a coalición que le habría dejado dinero a la presentadora para arreglar unos asuntos pendientes y reclamaba que se le devolviera el dinero, argumentando que algo habría quedado de la herencia de su expareja. Terelu, enfadada, recordaba que su madre no había dejado testamento por miedo a que se cumplieran las supersticiones en las que creía.

Terelu dejaba claro que no confía en que Edmundo vaya a dejar de hablar de su familia, por lo que anunciaba que «yo tengo mucha paciencia, mucha, pero igual ni un día se me acaba». Y recordaba cómo había acabado su relación con Pipi Estrada, con demanda de por medio: «Mira, yo esto ya lo he vivido de otra manera, en otra etapa de mi vida. Ya lo he vivido con otra persona. Yo lo he vivido». Para cerrar con el tema, recalcaba que ella no va a hablar de «este señor» y ponía en palabras lo mucho que le había enfadado la situación.