El Congreso de los Diputados acogerá este jueves el homenaje institucional de las Cortes Generales a las víctimas del terrorismo, una cita en la que se volverán a ausentar Vox y algunas de las principales asociaciones, como la Asociación Víctimas del Terrorismo (AVT), el Colectivo de Víctimas del Terrorismo (Covite) y Dignidad y Justicia (DyJ).

La AVT ya adelantó este lunes, por quinto año consecutivo, su ausencia al homenaje en rechazo a los acuerdos del Gobierno de Pedro Sánchez con Bildu, a los que consideran los «representantes de ETA en las instituciones».

Covite tampoco acudirá este año, como viene siendo habitual desde que se realizan estos homenajes, por la presencia de Bildu, ya que, según expresaron en un comunicado este martes consideran «cínico» que el homenaje venga de una institución en la que tienen representación «varios partidos políticos que legitiman la existencia de ETA y no condenan su violencia terrorista».

En la misma línea se pronunció la semana pasada la asociación DyJ, que tampoco acudirá este jueves a la Cámara Baja, porque consideran que en este homenaje «no puede haber más hipocresía que la de presumir de apoyar a las víctimas mientras las traicionas por debajo», en referencia a los pactos del PSOE con la formación vasca.

Al ‘plante’ de estas asociaciones, como ha sucedido en años anteriores, se ha sumado también Vox, aunque sus representantes sí que se acercarán a los alrededores del Congreso, pero sin entrar al homenaje del Parlamento, para mostrar su rechazo a participar en este acto en el que participa «el Gobierno con los herederos de ETA». El propio Santiago Abascal, en ocasiones anteriores tildó este evento de «mascarada de políticos sin escrúpulos».

HOMENAJE IMPULSADO POR BONO EN 2010

Este acto se viene celebrando desde que hace catorce años lo impulsara el entonces presidente, José Bono, que lo estableció coincidiendo con el Día de las Víctimas del Terrorismo acordado a iniciativa de las asociaciones. En esa fecha de 1960, una niña de 22 meses murió calcinada en un coche como consecuencia de un artefacto explosivo que el Directorio Revolucionario Ibérico de Liberación (DRIL) colocó en la estación de autobuses de San Sebastián.

Este año, la encargada de presidir el acto será la presidenta de la Cámara Baja, Francina Armengol, que estará acompañada además del presidente del Senado, Pedro Rollán, y diferentes representantes de las asociaciones de víctimas.

Tras varios años ubicando este homenaje en distintas salas, como la Sala Constitucional o el Salón de Pasos Perdidos, la anterior presidenta del Congreso, la socialista Meritxell Batet, decidió en 2019 darle mayor visibilidad llevándolo de nuevo al hemiciclo con el fin de dotar al acto en recuerdo de las víctimas del terrorismo de la máxima solemnidad.

MINUTO DE SILENCIO

Sin embargo, el año pasado, al estar las Cortes disueltas a la espera de las elecciones del 23 de julio, el homenaje volvió a ubicarse en la Sala Constitucional, un escenario que se mantiene también en esta ocasión.

El encuentro comenzará con un saludo por parte de los presidentes de ambas Cámaras a los representantes de las asociaciones en el Salón de Pasos Perdidos, y posteriormente, en la Sala Constitucional se interpretará el Lamentatio, de Giovanni Sollima, por la estudiante del Real Conservatorio Superior de Música de Madrid, Fabiola Sebastián.

Tras los discursos del presidente de la Fundación Víctimas del Terrorismo, Juan Benito y Armengol se guardará un minuto de silencio. El homenaje concluirá con la interpretación del Sarabanda de la Suite número 5 de Johann Sebastian Bach.