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Una impactante y preocupante escena se dio en el partido entre Perú y Canadá por la Copa América. Estaba por finalizar el primer tiempo, cuando uno de los jueces de línea, el guatemalteco Humberto Panjoj, se desplomó en el campo de juego del estadio Children’s Mercy Park de Kansas City.
El hecho paralizó a los espectadores y alarmó a los futbolistas, varios de los cuales se tomaron la cabeza. El primero en percatarse de lo ocurrido y socorrer al asistente fue el arquero canadiense, Maxime Crépeau, quien rápidamente corrió desde su área y pidió ayuda con desesperación.
La asistencia médica llegó de inmediato. Minutos después, Panjoj se puso de pie y trajo algo de tranquilidad. Sin embargo, continuaba mareado, por lo que lo subieron a una camilla y así lo retiraron de la campo. Lógicamente, el asistente debió ser reemplazado en la segunda parte: su lugar lo ocupó el ecuatoriano Ricardo Barén.
De momento no hubo precisiones sobre qué le sucedió, aunque se cree que pudo haber sufrido un golpe de calor por las altas temperaturas en la zona.
El cotejo, correspondiente a la segunda jornada del Grupo A del certamen continental, se está desarrollando con una sensación térmica que ronda los 37 grados y a Panjoj le había tocado ubicarse, durante los casi 50 minutos que duró el primer tiempo, en el sector donde recibía la luz solar de manera directa.
Por el calor agobiante, antes del susto con el juez de línea, el árbitro principal, Mario Escobar, decidió parar el juego promediando la primera etapa para que los protagonistas se hidratasen.
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