El Colegio Médico del Perú condenó este domingo las declaraciones del Ministro de Educación, Morgan Quero, quien sugirió que las agresiones sexuales denunciadas contra niñas awajún pueden ser una “práctica cultural que lamentablemente ocurre en los pueblos amazónicos”.

En un pronunciamiento firmado por el decano nacional, Pedro Riega, y el secretario general, Pavel Contreras, la institución médica remarcó que justificar el abuso sexual desde el Ejecutivo resulta “indignante y alarmante”, ya que “infringe gravemente los derechos fundamentales y atenta contra la vida y la salud emocional de niños y niñas, con consecuencias irreparables en su neurodesarrollo”.

“Es indignante que […] se relativicen situaciones así de graves contra la niñez. Urge que el Gobierno priorice la protección de la niñez, asegurando su bienestar en todas las políticas” públicas, se lee en la misiva. La entidad también exigió una respuesta que incluya una investigación efectiva, castigos ejemplares para los agresores, soporte completo a las sobrevivientes y sus familias, y la implementación de estrategias preventivas a nivel nacional.

Finalmente, exigió a Quero retractarse de sus declaraciones y “cumplir estrictamente con la Convención sobre los Derechos del Niño en sectores clave como salud y educación”.

CMP

La semana pasada, en TV Perú, el titular de Educación se refirió a un informe de La República, que entrevistó a Rosemary Pioc Tena, presidenta del Consejo de Mujeres Awajún, después de que elaborara un documento que contenía el reporte de al menos 524 casos de violencia sexual perpetrados por docentes contra escolares desde 2010 hasta mayo de 2024, algunos de los cuales habían derivado en contagios del virus de inmunodeficiencia humana (VIH).

“Estamos llevando a las niñas a que hagan la denuncia correspondiente, algunas ya son mayores. Vamos a trabajar de la mano con el Minsa para atender los temas de salud que correspondan. Y vamos a trabajar con los hermanos awajún porque estoy seguro de que debe haber algún tipo de solución para zanjar esta situación”, señaló Quero al respecto.

“Si es una práctica cultural [que] lamentablemente sucede para ejercer una forma de construcción familiar, vamos a ser prudentes, pero también exigiremos una respuesta a la población. Si estas niñas han sido violadas, no nos va a temblar la mano”, siguió.

Desde entonces, diversas organizaciones defensoras de derechos humanos, legisladores, activistas y académicos han exigido su renuncia, sobre todo porque es uno de los ministros más cercanos a la presidenta Dina Boluarte.

El Movimiento Manuela Ramos, el Centro de Promoción y Defensa de los Derechos Sexuales y Reproductivos (Promsex), la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos (CNDDHH) alertaron sobre el riesgo que representa su continuidad en el cargo y demandaron investigaciones rápidas, sanciones efectivas y medidas preventivas.

Pese a la ola de repudio, la ministra de la Mujer, Ángela Hernández, respaldó las controversiales declaraciones de su homólogo: “Se trata, efectivamente, de prácticas culturales que debemos desterrar, informar a las niñas y a las adolescentes, sobre todo, que es importante postergar sus relaciones sexuales y, si lo van a hacer, que sea protegido. Cuando es por abuso sexual tenemos que prevenir”, dijo en una rueda de prensa.

De acuerdo con la cartera de Educación, un incendio en la UGEL de Condorcanqui destruyó expedientes de procesos disciplinarios sobre denuncias de violaciones. Hasta ahora, 112 docentes abusadores fueron retirados y cuatro cesados temporalmente.

Una comisión especializada ha viajado a Condorcanqui para sostener un diálogo y acompañamiento permanente a las comunidades awajún. Además, se convocó una comisión intersectorial con varios ministerios y la Defensoría del Pueblo para apoyar a las sobrevivientes.