El ministro de Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, ha aterrizado este martes en la capital de Burkina Faso, Uagadugú, en el marco de su gira por el continente africano tras dos paradas en las que se ha reunido con líderes de República del Congo y Guinea.

Lavrov tiene previsto citarse con el jefe de la junta militar, Ibrahim Traoré, así como con otros altos mandos del país. Su visita se produce después de que el entonces ministro de Defensa Sergei Shoigu se comprometiera en noviembre de 2023 ante su homólogo burkinés, Cassoum Coulibaly, a fortalecer las relaciones bilaterales.

Las autoridades de Rusia y de Burkina Faso celebraron en diciembre de 2023 una ceremonia para la reapertura de la Embajada rusa en Uagadugú, una oficina diplomática que cerró hace más de 30 años, en 1992 en medio de un acercamiento entre ambos países.

Desde la llegada al poder de Traoré en octubre de 2022, Burkina Faso se ha alineado con los postulados de Rusia, llegando incluso a solicitar su ayuda para construir una central nuclear. El jefe de la junta llegó a describir a Rusia como una «familia para África» frente a la sumisión al «imperialismo» exhibida por otros líderes durante la cumbre Rusia-África celebrada en San Petersburgo el pasado verano.

Junto con Malí y Níger, Burkina Faso se ha acercado a Rusia y ha cortado sus lazos militares con Francia, desatando las preocupaciones de París por la pérdida de su tradicional peso en sus antiguas colonias en esta zona de África.