En Japón, un país con alta ingesta de sodio, la empresa Kirin Holdings lanzó un innovador dispositivo que promete ayudar a reducir el consumo de sal sin sacrificar el sabor de los alimentos. Se trata de la “Electric Salt Spoon”, una cuchara que utiliza corrientes eléctricas para aumentar la percepción de la salinidad en la comida. Este avance es fruto de una colaboración entre la empresa y Homei Miyashita, profesor de la Universidad de Meiji de Tokio. Ya logró captar la atención internacionalmente.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la ingesta diaria recomendada de sal es de alrededor de 5 gramos. Sin embargo, en Japón, los adultos consumen un promedio de 10 gramos al día, el doble de lo recomendado, según la agencia de noticias local Kyodo News. Este consumo excesivo de sodio está vinculado a problemas de salud como la hipertensión, los accidentes cerebrovasculares y otras afecciones graves.
“La cultura alimentaria japonesa tiende a favorecer los sabores salados”, afirmó Kirin Ai Sato, investigador de Kirin, en declaraciones recogidas por Sky News. “Sin embargo, es crucial que los japoneses reduzcan su consumo de sal para mejorar su salud a largo plazo. Este reto fue lo que nos llevó a desarrollar la cuchara eléctrica”, sentenció el investigador.
La cuchara eléctrica
La cuchara está compuesta de plástico y metal. Para funcionar pasa una corriente eléctrica débil a través de su punta. Esta corriente concentra las moléculas de iones de sodio en la lengua, lo que aumenta la percepción de salinidad de los alimentos hasta en una vez y media, según Kirin.
“El dispositivo permite a los usuarios elegir entre cuatro niveles de intensidad, adaptándose a las preferencias individuales”, explicó Sato. Cuanto más alto sea el nivel, menos deberá salarse la comida, para tener los resultados esperados.
Además, Kirin sugiere utilizar la cuchara en alimentos como sopas cargadas de ingredientes, curry, arroz frito, fideos y ramen, donde su eficacia es máxima. Justamente porque su función es reemplazar la sal, pero no el resto de los sabores que dan los condimentos y especias.
La cuchara pesa 60 gramos y está equipada con una batería de litio recargable, características que la hacen práctica y fácil de usar. En una encuesta realizada por Kirin en 2021, muchos japoneses que intentaban reducir su consumo de sal afirmaron que encontraban insípidos los alimentos bajos en sodio. Este nuevo utensilio podría ser la solución a esa queja generalizada.
La cuchara de sal eléctrica no es la primera incursión de Kirin en este tipo de tecnología. El profesor Homei Miyashita de la Universidad Meiji, quien ha colaborado estrechamente en este proyecto, ya había desarrollado anteriormente prototipos de palillos eléctricos que recibieron el premio Ig Nobel de Nutrición el año pasado. Este galardón honra investigaciones inusuales pero innovadoras.
A pesar de ser una herramienta que puede ayudar a muchos, la empresa resaltó que la cuchara no es apta para todos los públicos. Kirin recomienda que ciertos grupos, como los usuarios de dispositivos médicos (marcapasos o monitores de frecuencia cardíaca), personas alérgicas al metal, mujeres embarazadas y aquellos con problemas de nervios faciales o trastornos hemorrágicos, eviten su uso.
Kirin ha puesto inicialmente a la venta 200 unidades de la cuchara de sal eléctrica a través de su tienda online por un precio de 19.800 yenes (110.000 pesos argentinos). Además, habrá una edición limitada disponible en un minorista japonés. Sin embargo, las expectativas de la compañía son ambiciosas: esperan alcanzar un millón de usuarios en todo el mundo dentro de cinco años.
“A través de este dispositivo, pretendemos hacer realidad una sociedad en la que las personas puedan mejorar su estilo de vida de una manera deliciosa”, comentó Kirin según Kyodo News.