Tras veinte años sin conceder entrevistas a los medios de comunicación, Carlo Costanzia daba un paso al frente en un momento muy delicado para su familia y se sentaba en ‘¡De Viernes!’ para defender a sus hijos y aclarar algunos temas de los que tanto se ha hablado en los últimos meses. Él mismo reconocía que ha sido el «machaque mediático» que han sufrido sus hijos tras haber sido acusados de intento de asesinato. Carlo defendía que, si ni Pietro ni Rocco habían salido anteriormente en la prensa, no se les debía haber colocado en el ojo del huracán mediático.
Respondiendo a las preguntas de los colaboradores del programa sobre si estaba conforme con la educación que había dado a sus hijos, respondía que: «Con la misma pareja, tres hijos, misma educación, mismo principio y todo, y te salen tres personas completamente distintas. Y esto es un hecho, con lo cual es fácil decir las ovejas, no, es que uno sale como sale». Reconocía que lo peor de toda esta situación era el final que podría haber tenido esta historia: «Esto es una tragedia y si hay algo que de verdad a mí me quita el sueño es esto, porque si yo pienso que habría podido ocurrir a uno de mis dos hijos, no quiero ni saber».
También quiso hablar de la entrevista que daba su hijo Carlo hace apenas unos meses en la que confesaba sus problemas con las drogas y haber sufrido bullying. Echando la vista atrás, recuerda que «cuando Carlo sufre el bullying, primero, cuando yo me separo, yo no soy la persona que está a diario con Carlo. Porque yo soy el padre separado que tiene derecho a cada 15 días a estar con su hijo, ¿vale? Porque en la época, ser un padre separado, todavía lo es hoy, pero era muy complicado». Lo que más le dolía de esta época era no haber sido capaz de ahorrarle sufrimiento a su hijo: «Siempre se cometen errores. Lo único que me arrepiento es que mi hijo haya sufrido. Si yo soy parte responsable, por supuesto me arrepiento». Comentaba cómo él mismo había participado en terapias que fueron «muy duras, muy fuertes, pero yo le reconozco el valor de haberse dado cuenta, de haberlo reconocido y de haberse salido».
En cuanto a su relación con Mar Flores, dejaba entrever que estaba dolido tras leer su entrevista en la que «vuelve a desenterrar todo lo que ha pasado y no sólo me pone a parir a mí, encima a mis padres». Reconocía que actualmente su relación es nula desde hace años y recalcaba que él nunca ha opinado en estos años acerca de «si tenía tal novio o tal marido. Me da igual, es su vida, está contenta, haga lo que da la gana. Para mí era un tema ya cerrado (…). Yo no soy nadie más para opinar sobre lo que hace la señora Mar Flores de su vida». A pesar de todo, aseguraba que él espera que la relación entre su exmujer y su hijo Carlo sea «la mejor para él».
Otro punto clave de su entrevista era un nombre muy conocido por Carlo: Alessandro Lequio, a quien reconocía que «no le llamo conde, perdóname. Yo no puedo llamarle conde porque no es conde». Sacaba unos folios para leer la descripción y palabras que otros han utilizado para hablar de él y recordaba cómo había hablado de su hijo: «ha tratado a mi hijo Carlo de mafioso, porque lo ha comparado con el personaje de Fredo de la película de El Padrino, que encima, el personaje de Fredo, el pobre, le matan al final de la película, y yo espero que no pase nunca nada a mi hijo». Pasaba entonces a criticar a quien mantuvo una relación con Ana Obregón, dejando clara su animadversión hacia él: «¿Quién es este señor que se permite el lujo de la cátedra? Profesor universitario, digamos, de la vida, a insultar y dar lecciones de vida».
Por último, Carlo Costanzia hablaba de la nueva ilusión de su hijo. Reconocía que «no he tenido todavía el gusto» de conocer a Alejandra Rubio en persona, aunque no descartaba poder organizar un encuentro en los próximos días con ella y su hijo. Con una sonrisa en el rostro, aseguraba que su hijo no hace más que hablar maravillas de ella: «Me ha dicho que está encantado, está feliz, le veo muy… centrado, tranquilo, por lo que veo me parece una chica joven pero que sabe lo que quiere y si tiene que decir las cosas las dice». Agradecía a la nieta de María Teresa Campos por haber estado al lado de Carlo en estos tiempos tan difíciles para la familia: «Y sobre todo, estoy de acuerdo con Carlos que hay que tener valor también a estarle su lado con todos los problemas mediáticos».