• Para conseguir los 270 votos electorales necesarios para triunfar, el magnate se imponía en Georgia y Carolina del Norte, y aspiraba a hacerlo en Arizona y Nevada, y que habitualmente votan republicano. Y alguno más del “blue wall” (Pennsylvania, Michigan o Wisconsin).
  • La vice demócrata, en tanto, se jugaba todo a Pennsylvania, Michigan y Wisconsin, que se habían volcado por Joe Biden en 2020 y que ahora estaban disputadísimos.