El acoso a Pettovello fue interpretado por Milei como un posible tiro por elevación a su persona. De allí la solidaridad pública y política con la mujer, su vieja amiga. Aunque tal vez exagerada, la reacción presidencial tuvo que ver con una convicción: la ministra estaría liderando la batalla contra la corrupción más compleja desde que amaneció el gobierno libertario.