Taipéi, 4 jun (EFECOM).- El consejero delegado de Taiwan Semiconductor Manufacturing Company (TSMC), C. C. Wei, asumió este martes el cargo de presidente de la compañía en sustitución de Mark Liu, un movimiento que forma parte de una reorganización empresarial más amplia del gigante taiwanés de semiconductores.
“La tecnología de TSMC es líder. Nadie puede competir con nosotros”, aseveró Wei ante los medios de comunicación tras la reunión de la junta de accionistas en la que se formalizó su nombramiento como presidente en detrimento de Liu, quien ya había anunciado su intención de jubilarse a finales del año pasado.
Wei, que conservará el puesto de consejero delegado por el momento, manifestó que la primera, segunda y tercera prioridad de la firma será Taiwán, en medio de la estrategia de expansión internacional con la que TSMC pretende diversificar sus cadenas de suministro de semiconductores.
“El liderazgo tecnológico de TSMC es incuestionable. Todos los productos relacionados con la inteligencia artificial (IA) son producidos por TSMC”, aseguró el empresario, subrayando que la compañía “nunca ha tenido miedo de la competencia” y “siempre estará del lado ganador”.
La junta de accionistas eligió este martes por la mañana a los diez miembros del nuevo directorio de TSMC, de los cuales siete son “independientes”, y todos ellos votaron de forma unánime a Wei, según un comunicado difundido por la compañía tras la reunión.
Doctorado en Ingeniería Eléctrica por la Universidad de Yale, C. C. Wei (Taiwán, 1953) se unió a TSMC en 1998 y se convirtió en el único consejero delegado de la empresa en 2018, tras haber compartido con Liu los cargos de presidente y consejero delegado entre 2013 y 2018.
Bajo su administración, en la que tuvo que gestionar los delicados cuellos de botella en las cadena de suministro de semiconductores por la pandemia, TSMC no ha parado de crecer: el mayor fabricante de chips del mundo ha duplicado sus ingresos en los últimos seis años, totalizando unos 66.682 millones de dólares (61.188 millones de euros) en 2023.
El valor de mercado de la compañía también se ha disparado en este tiempo, multiplicándose por cuatro desde 2018 hasta alcanzar aproximadamente los 803.680 millones de dólares (unos 736.809 millones de euros), consagrando a TSMC como la firma más valiosa de Asia y la novena más grande del mundo.
Con todo, el nuevo mandato de Wei como presidente de la tecnológica no estará exento de desafíos, tanto por el desempeño cada vez más fuerte de sus dos principales competidoras (Samsung e Intel) como por la compleja consolidación internacional de TSMC, cuyas fábricas en Arizona (Estados Unidos) y Dresde (Alemania) todavía no han abierto.
A eso se suman las tensiones políticas entre China y Estados Unidos y la propia situación política de Taiwán, una isla autogobernada desde 1949, pero cuya soberanía es reclamada por el Gobierno chino con cada vez mayor insistencia. EFECOM
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