Los legisladores del estado estadounidense de Luisiana han aprobado este martes un proyecto de ley que criminaliza el uso de pastillas abortivas, lo que le convertiría en el primer estado que declara estos medicamentos como sustancias controladas.
La votación ha salido adelante con 64 votos a favor y 29 en contra, ya que la Cámara de Representantes está controlada por el Partido Republicano. Ahora, vuelve al Senado estatal y luego lo tendrá que firmar el gobernador, el republicano Jeff Landry, que se espera que la promulgue, según ha informado el periódico estadounidense ‘The Hill’.
La norma, a la que se han opuesto grupos antiabortistas y profesionales defensores de los derechos reproductivos, agregaría los medicamentos mifepristona y misoprostol a la lista de sustancias peligrosas controladas por el estado.
Este listado regula los medicamentos que pueden ser altamente adictivos como opioides o antidepresivos. Para recetar sustancias controladas, los médicos necesitan una licencia especial y las autoridades realizan un seguimiento del paciente, el médico y la farmacia involucrados en cada receta.
El aborto es ilegal en Luisiana, por que lo que no está permitido recetar alimentos para interrumpir un embarazo, excepto en circunstancias muy limitadas. La medida castigaría la posesión de estas pastillas sin receta válida u orden de un profesional con hasta cinco años de prisión.
La vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, ha afirmado que la aprobación de este proyecto de ley es «absolutamente inconcebible» y que el culpable de ello es el expresidente Donald Trump.
«Absolutamente inconcebible. La Cámara de Representantes de Luisiana acaba de aprobar un proyecto de ley que penalizaría la posesión de abortos con medicamentos, con penas de hasta varios años de cárcel. Seamos claros: Donald Trump hizo esto», ha indicado a través de su perfil en la red social X.