El ministro de Defensa de Reino Unido, John Healy, ha afirmado este martes a última hora que las fuerzas británicas «han desempeñado su papel» durante la jornada para «evitar una mayor escalada en Oriente Próximo», en lo que ha sido interpretado como una confirmación de la implicación de aviones militares británicos en la intercepción de misiles iraníes, tal y como ha hecho también Estados Unidos.
«Condeno rotundamente el ataque de Irán contra Israel. Esta tarde, las fuerzas británicas han desempeñado su papel en los intentos de evitar una mayor escalada en Oriente Próximo. Quiero agradecer a todo el personal británico que han participado en la operación por su valentía y profesionalidad. Respaldamos plenamente el derecho de Israel a defender su país y su pueblo frente a las amenazas», ha señalado a través de un comunicado publicado en su perfil de la red social X.
El primer ministro británico, Keir Starmer, ha llamado esta tarde a su homólogo israelí, Benjamin Netanyahu, con quien ha abordado la situación en la región. De hecho, en el momento de la llamada es cuando ha comenzado el ataque iraní, según un comunicado de Downing Street, en el que ha señalado que ha condenado «en los términos más enérgicos».
Starmer también ha mantenido una llamada con el rey de Jordania, Abdalá II, quienes han subrayado «la urgente necesidad de un alto el fuego tanto en Líbano como en Gaza». Así, han pedido una distensión para evitar que la «extrema situación humanitaria empeore».
Además, el jefe del Gobierno ha abordado la situación con líderes europeos como el de Francia, Emmanuel Macron, y el de Alemania, Olaf Scholz. Con ellos ha reconocido el «grave riesgo de una escalada regional» y han coincidido «en que garantizar la seguridad israelí es vital», puesto que hay una «necesidad urgente de reducir la escalada y que todas las partes muestren moderación».
Horas antes, el portavoz del Departamento de Defensa estadounidense, Patrick Ryder, ha detallado que dos destructores estadounidenses, el ‘USS Buckley’ y el ‘USS Cole’, lanzaron «docenas de interceptores» contra los misiles iraníes, siendo la mayoría interceptados, si bien se han producido «daños mínimos». También afirmó que Teherán ha utilizado «el doble» de misiles balísticos comparado con los lanzamientos que se produjeron en abril en respuesta al bombardeo israelí contra el consulado iraní en Damasco.