El Lehendakari, Imanol Pradales, ha presentado este martes en el Consejo de Gobierno el Programa del Ejecutivo de la XIII legislatura para su remisión al Parlamento Vasco, que se basa en el acuerdo de coalición suscrito el pasado 19 de junio entre PNV y PSE-EE, y en el que se determinan sus prioridades especificadas en cinco ejes, 32 áreas de actuación y 154 compromisos, muchos de ellos destinados a la mejora de Osakidetza.

El Ejecutivo Vasco subraya, además, que «comparte, en el marco que le corresponde», el acuerdo alcanzado entre jeltzales y socialistas sobre actualización del autogobierno, que prevé lograr un nuevo pacto estatutario, cuyo debate corresponderá a los partidos, y no al Gobierno, aunque este «se sentirá vinculado a los acuerdos que pueda adoptar el Parlamento Vasco.

El programa de Gobierno desarrolla y concreta el pacto de Gobierno de coalición de PNV y PSE-EE, que lleva el mismo título: ‘Ongizatean hazi. Bienestar, progreso, transformación y autogobierno para una Euskadi global’, y recoge los compromisos e iniciativas a desarrollar a lo largo del periodo 2024-2028.

Los objetivos giran en torno a cinco ejes, con 32 áreas de actuación y 154 compromisos, en materias como salud, empleo de calidad y talento, digitalización e inteligencia artificial, igualdad de género y derechos LGTBIQ+, autogobierno, o convivencia y Derechos humanos.

El primer eje, denominado ‘Las personas en el centro’, apuesta por una nueva agenda del bienestar que, poniendo a las personas en el centro de las políticas públicas y haciendo frente al triple reto sociodemográfico, energético-ecológico y tecnológico-digital, permita «seguir mejorando ámbitos como la salud, educación, empleo, vivienda, seguridad y servicios sociales».

ACUERDO SOBRE EL SISTEMA DE SALUD

El programa de Gobierno aboga por el diálogo con los profesionales de Osakidetza y la búsqueda de un «amplio acuerdo» sobre el sistema de salud que se «quiere y necesita». Para ello, se plantea establecer «un marco de trabajo y de colaboración permanente con los diferentes actores» que conforman el Servicio Vasco de Salud, así como agentes políticos, sociales e institucionales.

Uno de sus compromisos prioritarios es abordar un ‘plan de choque’ para la mejora de la atención y accesibilidad en la Atención Primaria, la reducción del tiempo de espera para ser atendido por el médico de familia, la reducción de las listas de espera quirúrgicas, así como los tiempos de demora para pruebas diagnósticas, consultas externas y de derivación a especialista.

El Gobierno vasco pretende que se garantice «el derecho de la ciudadanía vasca a la cobertura sanitaria universal y su accesibilidad a un servicio de salud con una amplia cartera de servicios» y, para ello, se tendrán presentes los cambios que afectan a la sociedad y la mayor demanda de servicios sanitarios públicos.

BIENESTAR

El segundo eje, llamado ‘Modelo de crecimiento y bienestar’, apuesta por propiciar, en un marco de colaboración público-privada, las condiciones para favorecer la reindustrialización de Euskadi aprovechando, entre otras cuestiones, las oportunidades que ofrece la nueva economía para favorecer un tejido industrial «moderno, dinámico, desarrollado y sostenible».

Además, aboga por unas condiciones que permitan crear y distribuir riqueza mediante un empleo «de calidad, sustentar servicios públicos sólidos y desarrollar políticas sociales que garanticen que nadie quede atrás».

El tercer eje, ‘Transformación energética y sostenibilidad’, reconoce que el calentamiento global es una realidad que cada vez afecta con más intensidad y a la que hay que hacer frente de manera «contundente e inmediata».

El cuarto eje, ‘Convivencia, Memoria y Derechos Humanos’, señala que la convivencia y el respeto entre todas las personas debe abordarse desde un punto de vista transversal y «lo más amplio posible». «Esta es la base de nuestra cultura democrática. La igualdad de mujeres y hombres en Euskadi y la defensa de los Derechos Humanos se han convertido en cuestiones fundamentales para nuestra sociedad», subraya.

CRECER EN AUTOGOBIERNO

El último eje, ‘Crecer en Autogobierno’, destaca en esta nueva legislatura el doble objetivo del cumplimiento íntegro del Estatuto de Gernika y consecución de las bases para elaborar un nuevo Pacto Estatutario a través de «la negociación, el acuerdo y el máximo consenso político en el Parlamento Vasco, en el ámbito de su competencia y de la legalidad vigente». También establece como objetivo prioritario aprovechar las oportunidades de futuro que presenta la internacionalización de Euskadi.

En concreto, en el compromiso programático 146, se precisa que «el Gobierno Vasco comparte, en el marco que le corresponde, el acuerdo entre el PNV y el PSE-EE sobre actualización del autogobierno».

De esta forma, recuerda que ambas formaciones plantearon en noviembre de 2016 un proceso de actualización del autogobierno que «garantizara el encaje jurídico-legal de una reforma que fuera tramitada de acuerdo con las normas y procedimientos legales vigentes, con el propósito de profundizar en la convivencia democrática, y avanzar en la cohesión y la justicia social».

Sobre esta base, en el acuerdo alcanzado en 2020, ambas partes plantearon, tal como subraya, «la virtualidad de profundizar en los trabajos desarrollados en el Parlamento Vasco, a fin de culminar con el proceso de actualización del Autogobierno vasco para, desde el mayor consenso posible y siguiendo los cauces legales establecidos y previstos, posibilitar la presentación de un proyecto de Proposición de Ley de reforma estatutaria».

A ellos se añade ahora el acuerdo suscrito entre PSOE y PNV el 10 de noviembre de 2023, en el que ambas partes pactaron «negociar y aprobar, tanto en Euskadi como con el Estado, el autogobierno futuro empleando las potencialidades de la Disposición Adicional Primera de la Constitución y de la Disposición Adicional del Estatuto de Gernika», con el compromiso de una negociación «de buena fe» y de sacar adelante un consenso, tanto en el seno de las instituciones vascas como en las Cortes Generales, «siendo posteriormente ratificado por el pueblo vasco».

Este documento precisaba que «el reconocimiento nacional de Euskadi, la salvaguarda de las competencias vascas y un sistema de garantías basado en la bilateralidad y la foralidad serán ámbitos a dialogar y negociar entre ambos partidos».

El programa del Gobierno Vasco resalta que los debates sobre el nuevo pacto estatutario corresponderán a los partidos políticos y no al Ejecutivo. De esta forma, la iniciativa legislativa y política en esta materia corresponderá a los partidos políticos y no al Gobierno, «que se sentirá vinculado, como no puede ser de otra manera, a los acuerdos que en tal sentido pueda adoptar el Parlamento Vasco en el ámbito de su competencia y de la legalidad vigente».

En materia de autogobierno, PNV y PSE-EE suscribieron, en el acuerdo de Gobierno que ahora se recoge en el programa, que ambos se reconocen «mutuamente libertad para defender sus respectivos postulados» y se comprometen «a no impedir debates o propuestas».

Asimismo, compartieron que cualquier iniciativa legislativa en este sentido «debería ser consensuada y aprobada por la mayoría absoluta del Parlamento Vasco y, con posterioridad, remitida a las Cortes Generales para su tramitación conforme a los cauces legales establecidos y, en su caso, ser sometida a decisión de la ciudadanía, para que lo ratifique en referéndum».