La presidenta de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, ha respondido en el Debate del Estado de la Región a las críticas vertidas por el PSOE sobre la subida de salario del 6,9% aprobada en 2023 para ella y sus consejeros, un asunto que ha querido «zanjar» señalando que, a su juicio, «el que toma las decisiones últimas, el que coordina, el que supervisa el trabajo y todo los demás, debe ser el más reconocido, también económicamente».

Buruaga ha lamentado el «populismo» que se ha venido haciendo de este tema, que ha ligado al «deterioro de la política», y se ha postulado como una persona «más seria y menos populista» que el líder socialista, Pablo Zuloaga, al que ha acusado de «cinismo e hipocresía» porque «se ha subido el sueldo más de lo que se ha subido el sueldo el Consejo de Gobierno, un 8,5%». «Diga la verdad y diga que usted gana mas que la presidenta y que los consejeros».

«Según su teoría, en una empresa los empleados deben ganar más que el director, ¿no?. Según la mía, no». «No puedo aceptar es el mensaje de que quienes se dedican al servicio público son los que menos valen, y por lo tanto tienen que ser los que menos ganen. Ese mensaje es perverso, y es de personas que estiman en muy poco el servicio público».

Buruaga (PP) se ha pronunciado así en el Parlamento después de escuchar la primera intervención de los portavoces de la oposición tras el discurso que dio esta mañana. PRC, PSOE y Vox han criticado la gestión del Gobierno en áreas como el turismo, la industria y especialmente la sanidad, por las listas de espera y el conflicto entre los profesionales de diferentes categorías que se quejan del acuerdo firmado solo con los médicos, que incluye una subida salarial. Precisamente, el debate ha coincidido con una manifestación de los enfermeros.

Al respecto, la jefa del Ejecutivo ha destacado que «nadie puede pretender que un enfermero gane lo mismo que un médico». «Pregúntense por qué los médicos se van de nuestro país», ha apostillado.

Asimismo, ha cuestionado las críticas de los grupos del anterior Gobierno, PRC-PSOE, cuando «les ha dado igual durante ocho años» el conflicto profesional que había en sanidad. «Ahora que estamos poniendo soluciones, resulta que la sanidad se hunde», ha ironizado.

Igualmente se ha referido al servicio de transporte sanitario para remarcar que «no se va a internalizar» porque «todos los análisis serios demuestran» que provoca aumento de costes y de conflictividad laboral.

También ha respondido a las acusaciones de que el Gobierno solo está desarrollando las iniciativas puestas en marcha la pasada legislatura y ha subrayado que «hay un abismo de proyectos más». También ha avanzado que pedirá que los Presupuestos Generales el Estado de 2025 incluyan financiación para los proyectos comprometidos con Cantabria.

Respecto al polígono de La Pasiega, ha asegurado que «no hay anomalías», «no hay ningún problema» porque es «rentable» y así lo reflejan «multitud de informes». También ha lamentado que los socialistas –que gestionaban anteriormente la Consejería de Sanidad– saquen pecho de la futura unidad de protonterapia en Valdecilla cuando la tramitación «ha sido un esperpento», ha quedado «fuera de todos los fondos europeos» y el Gobierno del PP lo ha «desbloqueado» y lo va a ejecutar.

VIVIENDAS TURÍSTICAS

Los portavoces de la oposición también han apuntado entre los principales problemas de la región la dificultad de acceso a la vivienda, algo ante lo que la presidenta ha apostado por construir más viviendas y no por intervenir en los precios.

«No vamos a limitar los precios en las zonas tensionadas porque es una medida que no funciona». «No se puede expropiar a las familias por la puerta de atrás», ha defendido después de que el PSOE le haya pedido tomar medidas, lamentando que a Pedro Sánchez «solo le preocupa la vivienda cuando hay un proceso electoral del que depende la suya».

También, ante las acusaciones de estar del lado de la «especulación» con la modificación de la Ley del Suelo y de permitir proyectos de grandes complejos turísticos, ha asegurado que «no vamos a consentir ningún proyecto que pretenda arrasar nuestra tierra».