Los líderes de América Latina han salido este miércoles a rechazar lo que el Gobierno de Bolivia ha calificado ya como un golpe de Estado, apelando al respeto de las instituciones y a la voluntad popular. «La democracia prevalecerá», ha dicho el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva.
«Total rechazo al golpe militar en Bolivia. Invito a todo el pueblo boliviano a la resistencia democrática. América Latina debe unirse a favor de la democracia», ha expresado el presidente de Colombia, Gustavo Petro.
«La Embajada de Colombia debe otorgar refugio a los perseguidos. No habrá ninguna relación diplomática de Colombia con la dictadura. Un golpe antidemocrático se enfrenta con la movilización generalizada del pueblo», ha dicho.
El presidente de Chile, Gabriel Boric, ha enviado sus muestras de apoyo a la democracia y al Gobierno legítimo de Arce. «Condenamos enérgicamente la inaceptable acción de fuerza de un sector del Ejército de ese país», ha repudiado.
Por su parte, el presidente Lula ha manifestado su deseo por que la democracia prevalezca en todo América Latina. «Condenamos cualquier forma de golpe de Estado en Bolivia y reafirmamos nuestro compromiso con el pueblo y la democracia del país hermano presidido por Luis Arce», ha enfatizado.
Mientras, el presidente paraguayo, Santiago Peña, ha condenado «las movilizaciones irregulares del Ejército de Bolivia», al mismo tiempo que ha hecho un llamamiento «enérgico» a respetar la democracia y el Estado de Derecho.
A su vez, el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, ha expresado su condena «más enérgica» por lo sucedido. «El Ejército debe someterse al poder civil legítimamente elegido», ha instado.
«Enviamos nuestra solidaridad al presidente de Bolivia Luis Arce Catacora. La comunidad internacional, la OEA, no tolerarán ninguna forma de quebrantamiento del orden constitucional legítimo en Bolivia ni en ningún otro lugar», ha manifestado.
El pueblo de Bolivia y su Gobierno también ha recibido muestras de solidaridad por parte del presidente saliente de México, Andrés Manuel López Obrador, quien ha subrayado su «total apoyo» al presidente Arce, a quien ha ensalzado como «auténtica autoridad democrática de ese pueblo y país hermano».
Desde Guatemala, el presidente Bernardo Arévalo, ha subrayado que «ni la fuerza, ni la imposición son la vía para la construcción de naciones democráticas y libres», expresando su respaldo al pueblo boliviano y al presidente Arce.
El presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou, también ha condenado lo ocurrido y ha enviado su solidaridad al «legítimo Gobierno del presidente Arce», mientras que la Presidencia de Perú ha hecho lo propio, expresado su rechazado a «todo acto que atente contra el orden democrático e institucional» de Bolivia.