La curiosidad de los perros en algunas ocasiones los lleva a cometer cosas que te disgustan, ya sea el que esté empecinado a oler ciertas cosas en la calle, que no te obedezca mientras salen a caminar juntos o incluso a comer cosas que no deberían, una de estos casos podría ser tragarse una cucaracha.
Las cucarachas están vinculadas en primer plano hacia lugares insalubres, transmisión de enfermedades y virus; actualmente se conocen cerca de 3 mil 500 especies de acuerdo con el estudio Cucarachas: Biología e Importancia en Salud Pública publicado por la Universidad Autónoma de Nuevo León, en México.
“En la actualidad se conocen alrededor de 45 patógenos que pueden transmitir de manera mecánica, hallando principalmente, bacterias, hongos protozoarios, helmintos y virus”, dice el artículo realizado por Gustavo Ponce, Pedro C. Cantú, Adriana Flores, Mohamed Badii, Artemio Barragán, Raúl Zapata e Ildefonso Fernández.
Por esta razón es que llega a ser preocupante el hecho de ver o pensar si tu “mejor amigo” se come alguno de estos insectos.
A tu perro le pueden atraer las cucarachas
Por muy desagradable que suene esto, es muy probable que tu mascota se siente atraída por el olor que emanan los insectos. Los perros hacen del olfato su sentido primario para percibir el mundo que los rodea, esta especial sensibilidad los ha hecho desarrollar otras habilidades impresionantes como el poder detectar algunas enfermedades en las personas de acuerdo con la revista especialista en veterinaria DVM Newsmagazine.
De igual manera, un estudio publicado por la Facultad de Ciencias de la vida de Poznan, Polonia, descubrió que los caninos llegan a mostrar un interés igual que a sus croquetas, con algunos insectos, como las larvas de gusano de la harina, cucaracha de Turkestán, larvas de mosca y cricket doméstico tropical.
Por esta razón es que llegan a comerse cualquier tipo de insecto, porque el olor que emiten les atrae, ante esta curiosidad es posible que lo lleven hacia su hocico.
¿Qué pasa si ya se comió una cucaracha?
La veterinaria Leonor Benítez Velázquez, aseguró en entrevista que las cucarachas son portadoras de salmonella, debido a los entornos sucios en los que se desarrollan, lo que podría manifestarse a través fiebre, diarrea con o sin sangre y fiebre, siendo estas últimas consecuencias un evento bastante particular a raíz de tragar este insecto.
“Igual como no le puede hacer nada, le puede dar una gastroenteritis, diarreas, vómitos, diarreas con sangre, algunas veces fiebre, estos podrían ser los síntomas”, comentó la licenciada.
Asimismo, compartió que todo estos síntomas lo puede causar cualquier otra cosa, no solo una cucaracha por lo que será importante contarle al especialista cuáles son los cambios a los que se ha visto expuesta la mascota en las últimas horas.
“El veterinario determinará qué fue lo que pasó y te preguntará si hubo algún cambio en la dieta, salió a pasear, salió al campo, y comenzará a relacionar cuáles son las posibles causas de esto”, comentó.
La única forma en la que se podría saber que la raíz de todos estos síntomas sea el de una cucaracha es que el dueño haya visto al perro comérsela. De acuerdo con la Lic. Leonor Benítez los síntomas que este podría generar son muy similares a los de una gastroenteritis.
Por otro lado aseguró que la cucaracha esté muerta o viva el efecto va a ser igual, aún así si el insecto fue asesinado con algún veneno, no debería de ser grave debido a la diferencia de tamaños que hay con tu mascota.
“Sería diferente si se comiera una rata muerta que haya sido envenenada, ahí al ser de mayor tamaño podría haber algún tipo de peligro”, concluyó Leonor Benítez.