Sevilla, 2 oct (EFE).- El capitán del Sevilla, Jesús Navas, afirmó que tiene «muchas ganas e ilusión de que llegue el último derbi» que disputará contra el Betis por su anunciada retirada a final de año, este domingo en el Ramón Sánchez-Pizjuán, en el que se convertirá en el futbolista con más presencias en los partidos de la máxima rivalidad hispalense.
Jesús Navas, quien cumplirá 39 años el próximo 21 de noviembre, jugará su vigésimo octavo encuentro oficial contra el Betis desde su debut en los derbis en mayo de 2005 y superará los 27 que tiene Joaquín Sánchez en lo que, según destacó este miércoles, supone «un partido diferente para los futbolistas y para la afición».
«Es bonito haber jugado tantos derbis, haber disfrutado de estas ocasiones tan especiales. Lograr la victoria sería el premio más bonito», recalcó en rueda de prensa.
El jugador palaciego, que se retirará a finales de 2024, señaló que su familia le «dice que pare ya» debido a los fuertes dolores que le produce su lesión crónica de la cadera derecha, ya que, aunque «jugado siempre con dolores, lo de estos meses es tremendo», y por ello su retirada se debe a que «el cuerpo no da para más; hay en días, en casa, en los que lo paso fatal», aseguró.
Sin embargo, Jesús Navas indicó que «las ganas y la cabeza lo son todo», por lo que tiene la «intención de llegar bien al partido y darlo todo para ayudar al equipo en esta transición», aunque tiene claro que no será un derbi vistoso, ya que suelen ser «partidos muy tácticos, de no cometer errores».
«Es mi Sevilla y es mi afición, lo hago por ellos. Lo más bonito es que veinte años después de mi primer derbi sigue la misma pasión en la ciudad y en las dos aficiones. A los nuevos les intento inculcar que es un partido especial en el que salir a por todas para darle a nuestra afición lo que se merece», aseveró el lateral internacional con España.
Para el capitán sevillista, supone «un orgullo tener el respeto de las distintas aficiones, incluso en el Benito Villamarín», donde recordó que el publicó le brindó «una ovación» cuando asistió «al homenaje a Joaquín», y cree que ello es la recompensa por «tener valores como la humildad».
«Lo más importante es haber sido siempre uno mismo, no haber cambiado desde que jugaba en el filial», manifestó. EFE
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